Dinner For Schmucks es la versión americana de la comedia francesa y la parte de la comedia (según mi sentido del humor) se la olvidaron del otro lado del océano.La historia es la de un empleado que para conseguir un puesto mejor debe pasar un último reto: ir a la casa de su jefe con un tonto para la cena que organizan todos los meses los de la oficina para burlarse de estos personajes. El tonto que encuentra Paul Rudd no es otro que Steve Carell y en cuanto vi a Steve Carell sabía que iba a ser una pesadilla, lo siento pero no lo aguanto, ni a él ni a su sentido del humor.
La película me pareció aburrida. El personaje de Carell o Carell (aún no lo sé) me generó violencia, para ser sincera todo en esta película me generó violencia. El humor europeo no es el mismo que el humor americano y generalmente cuando hacen estas versiones hay una fuerte adaptación que a la película no le sienta bien, hay varios ejemplos, uno de los últimos (con este) es el de Death at a Funeral.
A los que les guste el humor americano y estos actores puede que la encuentren entretenida. Los que ya saben que disfrutan y se ríen con otras cosas les recomiendo que no la vean.
Puntaje: 1
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